EL amor a Dios y al projimo es el ingrediente fundamental que ha de regir nuestra vida.
Como dice Pablo: De nada sirve que entreguemos todos nuestros bienes a los pobres o que entreguemos nuestros cuerpos para ser quemados, pero si no hay amor de nada sirve.
Oremos cada dia para que Dios ponga en nosotros un corazon generoso, compasivo, misericordioso y diligente a favor de quienes nos rodean. Esto es algo por lo que siempre hemos de orar, ya que como humanos que somos tendemos rapidamente a obrar bajo otros propositos que sutilmente pueden influenciarnos.
Esa es mi oracion de cada dia: SEÑOR QUIERO AMAR COMO TU AMAS A TODOS SIN EXCEPCION.
El reto nuestro de cada dia es que aquellas personas que entren en contacto con nosotros, puedan vernos como un instrumentos de Dios, que con nuestras actitudes y palabras se sientan bendecidas.
Es necesario que seamos diligentes en conocer el estado nuestros semejantes, sensibilizarnos y obrar a favor de ellos.
Es mas, si esta en nuestras posibilidades ayudar a quienes nos han dañado, hemos de hacerlo sin dilacion de tiempo.
Es lindo seguir el ejemplo de Cristo quien dijo: EN ESTO CONOCERAN TODOS QUE SOIS MIS DISCÃ
La CLAVE del TESTIMONIO cristiano.
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