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Categoría de nivel principal o raíz: La Teologia Reformada
Categoría: Estudios de Gracia
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Por Rev. Roger Smalling, D.Min



 

Porque la gracia de Dios se ha manifestado para salvación a todos los hombres...  

Tito 2:11


Puesto que la gracia trae salvación, es crucial comprender lo que la gracia significa.Si preguntamos a algunos cristianos lo qué piensan sobre la gracia, probablemente muchos estarían de acuerdo con la siguiente definición: "La gracia es la bondadosa disposición de Dios para perdonar a los pecadores arrepentidos."

Desafortunadamente, esta definición es solamente una verdad a medias y describe mejor lo que es la "misericordia." Algunas veces la Escritura usa la gracia como un sinónimo de misericordia. Sin embargo, sería una grave reducción limitarla a esto solamente. Así como los cimientos mal hechos pueden ocasionar que se derrumbe un edificio, las doctrinas defectuosas pueden traer consecuencias devastadoras en las doctrinas vitales.

Gracia significa "favor divino no merecido." El término griego en el original es charis, que se deriva del verbo charizomai. Esta palabra significa "mostrar favor para" y asume la bondad del dador y la indignidad del recipiente. Cuando charis se usa para indicar la actividad de Dios, significa "favor no merecido."

La gracia y la misericordia tienen dos distinciones importantes. Primero, la misericordia es universal en tanto que la gracia es particular. La misericordia se basa en el mandato universal de Dios de arrepentirnos.

"Pero Dios, habiendo pasado por alto los tiempos de esta ignorancia, ahora manda a todos los hombres en todo lugar, que se arrepientan" Hch. 17:30.


Inherente a este mandato se asume que el pecador arrepentido será perdonado. Existe una oferta divina de misericordia para toda la humanidad. Por esta razón, Dios nunca puede ser acusado de injusto meramente porque algunos reciben una gracia especial. Dios nunca rechaza a un pecador arrepentido.

Además, la gracia nunca ha sido "ofrecida" a todo el mundo ni siquiera a los elegidos. La gracia no es una oferta. Es una dádiva no merecida y particular en el sentido de que Dios otorga un favor solo a algunos, no a todos. Vemos esto más claramente en la relación entre gracia y elección.

"...ha quedado un remanente escogido por gracia" Ro. 11:5.

Por tanto, vemos que las distinciones claves entre misericordia y gracia son las siguientes: La misericordia es universal y es ofrecida a todos. La gracia es particular, otorgada a algunos.

Los aspectos importantes de la gracia

La gracia es eterna

"Quien nos salvó y llamó con llamamiento santo, no conforme a nuestras obras, sino según el propósito suyo y la gracia que nos fue dada en Cristo Jesús antes de los tiempos de los siglos" 2 Ti.1:9

La eternidad no es tiempo lineal que se extiende indefinidamente, sino una dimensión sin tiempo donde Dios reside. La gracia se originó allí, más allá del control humano. Nada en nuestra dimensión tiempo-espacio continuo fue causa de Su gracia y nada podría cambiar la mente de Dios ahora.

La gracia no es merecida

Note de nuevo que 2 Ti.1:9 excluye las "obras" de la "gracia y propósito" de Dios. No solamente que la gracia no está asociada con los méritos, sino que es lo diametralmente opuesto, tal como Pablo lo aclara en Romanos 11:6


"Y si por gracia, ya no es por obras; de otra manera la gracia ya no es gracia...."
Igualmente, la gracia no depende de la obediencia a la Ley.

"...pues no estáis bajo la ley, sino bajo la gracia" Ro. 6:14.

Una forma segura para demoler la gracia es mezclarla con algún mérito cualquiera que fuere.


La gracia es una calidad divina

La gracia es una característica de cada uno de los miembros de la Trinidad.

Del Padre: Ro. 1:7 "..Gracia y paz a vosotros, de Dios nuestro Padre y del Señor Jesucristo."

Del Hijo: Gá. 6:18 "Hermanos, la gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con vuestro espíritu. Amén."

Del Espíritu Santo: Za. 12:10 "Y derramaré sobre la casa de David.....Espíritu de gracia...." He.10:29 "...e hiciere afrenta al Espíritu de gracia."

La gracia es soberana

Para expresar que la gracia es soberana, Pablo la asocia con Su "beneplácito, el cual se había propuesto en Sí mismo." Parece que Dios no consultó con nadie al elegir los recipientes de Su gracia, ni esperó por el permiso de nadie. Vea Ef. 1:7-9.

La gracia es la única base de nuestra aceptación frente a Dios

"Para alabanza de la gloria de su gracia, con la cual nos hizo aceptos en el Amado" Ef.1:6.

Por consiguiente, cualquier enseñanza que ofrezca fórmulas o técnicas para obtener la aceptación de Dios, que no sea la gracia sola, es falsa. El perdón de pecados, la redención por medio de la sangre de Cristo, la sabiduría y el entendimiento y todas las bendiciones espirituales son dados por sola gracia. Vea Ef. 1:1-5.

 

La gracia es santa

"Porque la gracia de Dios se ha manifestado para salvación a todos los hombres, enseñándonos que, renunciando a la impiedad y a los deseos mundanos, vivamos en este siglo sobria, justa y piadosamente" Ti. 2: 11-12.

Incluso durante el primer siglo existieron movimientos que asociaban la gracia con el libertinaje. Los apóstoles nos advirtieron sobre estos en versículos como Judas 4:

"Porque algunos hombres han entrado encubiertamente, los que desde antes habían sido destinados para esta condenación, hombres impíos, que convierten en libertinaje la gracia de nuestro Dios..."


Cualquier insinuación de que la gracia da a los cristianos libertad para actuar en forma carnal es herejía. Los que enseñan tales cosas prueban que no tienen gracia.


La gracia es para pocos, no para todos  

"Así también aun en este tiempo ha quedado un remanente escogido por gracia" Ro. 11:5.

Un "remanente", por definición, se refiere a unos pocos entre un grupo grande. La única razón para que exista un remanente a salvo es la gracia de Dios.


La gracia es un misterio

La gracia no se fundamenta en méritos humanos. La pregunta de por qué algunos la reciben y otros no, permanece en el misterio. De nuevo esto parece injusto hasta que nos damos cuenta de que Dios no debe nada a nadie. Irónicamente, los intentos de resolver el misterio de la gracia terminan en herejía.

Predicar el evangelio significa predicar la gracia


"...y el ministerio que recibí del Señor Jesús, para dar testimonio del evangelio de la gracia de Dios" Hch. 20:24.


El ministerio del evangelio no tiene otro mensaje que la gracia de Dios en Cristo. Si esto no es lo que se estamos predicando, entonces no estamos predicando el evangelio.

Pregunta clave 

¿Es la salvación una obra de cooperación entre Dios y el hombre?

Los teólogos discuten este punto con dos palabras: sinergismo y monergismo.

El sinergismo viene de dos palabras griegas: "syn" juntos y "ergos" obra. Significa que la salvación es una obra de cooperación entre Dios y el hombre. Según este modo de pensar, el hombre contribuye en algo para su salvación. Sin embargo, su contribución no es suficiente y necesita ser suplementada por Dios.

Si el sinergismo es correcto, entonces Dios es un asistente del hombre en sus esfuerzos para salvarse a sí mismo. Dios es el agente pasivo que espera que el hombre pida ayuda. Dios responde a la iniciativa del hombre.

El monergismo viene de dos palabras griegas: "mono" solo y "ergos" trabajo. Significa que la salvación es un trabajo de Dios solo. El hombre no es capaz de contribuir. Por tanto, Dios es el agente activo y el hombre responde a la iniciativa de Dios.

¿Qué es lo correcto, el sinergismo o el monergismo? La respuesta depende de si la fe salvadora es en sí misma una obra de la gracia de Dios.

Unos pocos textos claves resuelven el asunto:


"Pero la gracia de nuestro Señor fue más abundante con la fe y el amor que es en Cristo Jesús" 1 Ti.1:14.

Aquí, la gracia trae las virtudes de la fe y el amor

"...a los que por la gracia habían creído" Hch. 18:27. 

La gracia fue claramente la causa de la fe de los que creyeron.

"Porque a vosotros os es concedido a causa de Cristo, no sólo que creáis en él, sino también que padezcáis por él" Fi. 1:29.

El término "concedido" aquí es CHARIZOMAI en Griego, que significa dar libremente por gracia. Significa más que mero permiso para creer. Creer fue algo que Dios obró en aquellos creyentes.

"Y dijo: Por eso os he dicho que ninguno puede venir a mí, si no le fuere dado del Padre" Jn. 6:65.

Si venir a Cristo significa creer en Él, entonces la fe viene de Dios Padre como un obsequio.

Textos similares son: Hch.13:48; He.2:2; Jn. 6:44; Ti.1:1

Una vez que una persona es salva, ¿cómo obra la gracia y la fe?

Un pecador está muerto en sus pecados, incapaz de generar por su libre albedrío la fe salvadora hasta que Dios obre poderosamente en él por medio del Espíritu por el evangelio.

Sin embargo, una vez que el pecador es salvo, la fe activamente transfiere la gracia para el vivir cristiano. La fe está ya allí para que el creyente la use para conseguir más gracia todavía.

La gracia, en este punto, muestra su naturaleza multifacética. ("...la multiforme gracia de Dios" 1Pe. 4:10). Una vez que un pecador es salvo por gracia, él comienza a aprender a vivir por gracia. El mayor error que un cristiano puede cometer es suponer que la gracia ya no es necesaria.

La gracia nos pone a trabajar

" Pero por la gracia de Dios soy lo que soy; y su gracia no ha sido en vano para conmigo, antes he trabajado más que todos ellos; pero no yo, sino la gracia de Dios conmigo" 1Cor.15:10.

La gracia es activa, no pasiva.

Aunque no podemos obtener la gracia por nuestras obras; no obstante, la gracia resulta en obras. Cuando Lucas dijo sobre los apóstoles: "abundante gracia era sobre todos ellos," quiso decir que ellos eran productivos por el poder de Dios.

La gracia nos hace firmes

"Por quien también tenemos entrada por la fe a esta gracia en la cual estamos firmes, y nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios" Ro. 5:2.

La gracia nos permite acercarnos a Dios con confiadamente

"Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro" He. 4:16.

La gracia vence al pecado

"Para que así como el pecado reinó para muerte, así también la gracia reine por la justicia para vida eterna mediante Jesucristo, Señor nuestro" Ro. 5:21.

A veces cristianos intentan vencer el pecado por medio de toda clase de cosas...el legalismo, las buenas obras, incluyendo el maltrato físico del cuerpo. Sin embargo, la gracia hace la obra porque nada más puede hacerlo.

"Tales cosas.....no tienen valor alguno contra los apetitos de la carne" Col. 2:23.

Los medios de gracia

Recordemos que en la Lección 3 estudiamos cómo Dios trabaja a través de medios.

Aunque la gracia es soberana en la vida del creyente, Dios nos da "medios" para que nuestra santificación. Estos medios son la Palabra, la oración y los ministerios de la Iglesia. Conforme vamos aplicando estos medios, Dios continúa suministrándonos su gracia para que podamos caminar con Él. Dios no es dependiente de estos medios ni nosotros deberíamos asumir que hemos mericido la gracia porque los hemos aplicado. Nosotros dependemos solamente de la gracia de Dios pero reconocemos nuestra responsabilidad de aplicar los medios para el fin que Él los ha provisto.


Porque Dios es el que en vosotros produce así el querer como el hacer, por su buena voluntad Fil. 2:13.

Resumen

La gracia salvadora es un favor no merecido de Dios. Es soberana y depende exclusivamente de la voluntad Divina. La gracia es lo opuesto al mérito. Aunque Dios ofrece misericordia a toda la humanidad, bajo la condición de arrepentimiento, Su gracia es concedida a un grupo elegido. La gracia es la sola causa de la salvación; por tanto, esta no se basa en ninguna contribución humana.

La gracia en la vida del creyente es multiforme. La gracia hace posible que caminemos con Dios y nos da poder para hacer Su obra. Dios solo es la causa de la gracia, aun cuando Él requiere que los cristianos apliquen fielmente los medios que Él ha puesto a su disposición para crecer.

En este ensayo hemos aprendido:


1. La gracia en un favor divino no merecido. Es una cualidad divina eterna, santa y poderosa.
2. La gracia y la misericordia son similares pero no idénticas. La misericordia es ofrecida a todos pero la gracia es otorgada a algunos.
3. La fe salvadora es una obra de gracia.
4. Los creyentes dependen de Dios solo, por Su gracia sustentadora mientras aplican los medios. Los medios son la Palabra, la oración y los ministerios de la iglesia.



A muchos de los que disfrutaron de este ensayo, también les gustó nuestro libro
Si, Jesus .  

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